Herramientas
para la innovación en el proyecto arquitectónico.
También
la arquitectura tiene una segunda intención (…) la idea de crear un paraíso. Es
el único significado de nuestras casas. (…) deseamos construir un paraíso
terrenal para los hombres.
Alvar Aalto
Hace tres años, Roberto
comenzó a dar forma a uno de sus grandes sueños: Construir una casa para crecer
con su familia.
Durante este tiempo ha
estado diseñando sus espacios utilizando herramientas informáticas gratuitas, y
se ha inspirado en los planos e imágenes que se ofrecen en las revistas de
vanguardia y otras publicaciones.
Figura 1. Imágenes de la “vivienda
ideal” de Roberto previo uso de las herramientas.
Tras contactar con
nosotros, Roberto nos facilita todo el material gráfico de lo que considera que
sería su vivienda ideal, y que ha estado elaborando a lo largo de estos años.
No tardamos en descubrir al ser original que se encuentra atrapado tras capas y
capas decondicionamientos sociales, víctima de la estandarización y las
imágenes de moda doméstica difundidas por los medios de comunicación.
Ha sido decisiva la
aplicación de una herramienta revolucionaria: el Sistema de Diseño Humano
(SDH). Gracias al análisis de su gráfico individual, sus planteamientos rígidos
basados en los condicionamientos recibidos a lo largo de su vida, dan paso a
requerimientos más auténticos que brotan de su propia naturaleza; el ser que
empieza a ser comprendido y aceptado desde su individualidad.
Trabajamos en el proyecto
apoyándonos en estas nuevas premisas vitales para articular los condicionantes propios
del contexto: presupuestarios, urbanísticos, climatológicos…
Las resonancias tienen
efectos inmediatos en su ser: Roberto se siente plenamente reconocido. Sus ojos
brillan con más intensidad de lo habitual y derraman lágrimas por su rostro; ve
el lugar. Se ve a sí mismo habitando y creciendo entre los espacios que hemos
representado en esos primeros planos. Experimenta la magia de llegar a vivir su
sueño.
La grandeza de un espacio
único que responde a la verdadera naturaleza de cada ser, genera una nueva manera
de habitar que resuena en el corazón de la persona desde la que ha sido creado.
Un diseño
para su co-razón
Lejos de toda pretensión,
nos aproximamos al futuro habitante con la plena disposición de escucharlo y acompañarlo
en el proceso de materializar su sueño de habitar; habitar en una arquitectura
con a minúscula (1). Renunciamos a cualquier imagen preconcebida, sea abstracta
o monolítica; al urbanismo en la medida de lo posible, sobre todo el que nos
aleja de la urbanidad. Nos alejamos de la idea de universalizar, del hombre
tipo, del estilo de vida contemporáneo, de lo que está vacío de humanidad, de
esencia humana o de sustancia.
De Roberto, queremos saber
qué le ha llevado elegir ese lugar donde crecer durante los próximos años; queremos
saber qué le hace disfrutar y cómo está viendo su cotidianeidad. Queremos saber
si es feliz desde que despierta hasta que se acuesta… necesitamos saber quién
es; si está satisfecho consigo mismo y cómo experimenta el mundo alrededor; su
propio mundo.
Conversamos con él creando
un espacio desde donde pueda expresarse cómodamente, y discretamente le hacemos
preguntas. Nada de lo que ocurre en su vida queda excluido. Cada una de sus
anécdotas nos facilita la información necesaria para abordar el proyecto con el
máximo rigor. Él es el centro de todas las propuestas que emergen. La idea
germinal está enraizada en sus fuerzas vitales y el proyecto está dirigido a
ofrecerle escenarios, recorridos y paisajes en consonancia con la vida que está
creciendo desde sí mismo (2).
Implementación
de herramientas en el proyecto
Han sido necesarios cuatro
años de formación en este sistema de autoconocimiento, y el trabajo simultáneo con
la psicología de los eneatipos que nos proporciona el Eneagrama de la
personalidad, para aplicar estas herramientas de manera efectiva al campo del
diseño arquitectónico. El análisis en paralelo de la Carta del Rave y el mapa
de la personalidad de un individuo, nos dan las claves para reconocer tanto su
naturaleza esencial como la forma distorsionada que ha adoptado al no ser
reconocido en su verdadera esencia por su
entorno vital durante sus
primeros años de vida. Estas herramientas nos brindan la posibilidad de
facilitarle un recorrido de regreso a casa (3); al ser autentico que somos nada
más llegar y al que no podemos renunciar si queremos ser felices (4).
En este proyecto, el SDH
nos ha proporcionado el gráfico desde donde acceder a los estratos más profundos
de la naturaleza de Roberto. Este mapa, además, nos permite deducir con gran
precisión la estructura del carácter de cada individuo, su eneatipo, que
habitualmente se erige como una fortaleza que tiende a limitar de manera
dramática el ámbito de decisiones y experiencias de su portador. De esta manera,
reconocemos los vehículos desde donde se despliega el viaje de Roberto: el
cuerpo físico, mental y emocional, así como la forma energética que nos muestra
las constantes vitales que lo impulsan desde su nacimiento y que van a
acompañarle hasta su último día de vida. Estas son las fuerzas que colocamos en
el lugar más elevado de
nuestro proceso creativo y que, por lo tanto, van a conformar el marco
vivencial y relacional del hábitat de Roberto.
Figura 2. Carta Rave de
Roberto y mapa de la personalidad.
Descubrimos su manera de
establecer un estilo de vida a través del reconocimiento de la dualidad fundamental
que existe en cada bioforma humana: somos una consciencia binaria, una síntesis
de una consciencia de la Personalidad y una consciencia del Diseño. El perfil
nos permite comprender la combinación de las dos.
Sintetizamos las
principales tramas vitales extraídas del análisis del gráfico:
· Proceso
vital de tres fases para surgir como un Modelo de Conducta: El de Roberto, un
perfil 6/2, nos revela una personalidad de línea 6 que viene a ser ejemplar y
que pasará por tres fases significativas en su vida. De esta forma acontece el
despliegue de su ser para ejercer un papel de liderazgo en su fase de madurez,
y desde ahí mostrarnos cómo vivir conforme a nuestra propia autoridad.
· El
ermitaño inconsciente de línea 2, dispone de un talento natural y quiere que le
dejen en paz para hacer sus cosas. Su genialidad original debe ser protegida
para permitir que se desarrolle naturalmente y puesta a disposición del mundo
llegado el momento. No le vale cualquier cosa, y va a estar atento a una
llamada específica y especial que le permitirá poner de manifiesto sus dones y
encarnar su poder de modelo de conducta.
· Catalizador
de cambios: Su Canal de Apertura -22/12- junto con la Puerta de la Crisis -36-
definen su naturaleza emocional, en el área derecha del gráfico, que nos revela
las dinámicas de un ser social con una enorme capacidad para provocar cambios
en la vida de otros individuos. Este potencial depende del grado de paciencia
que cultive y la profundidad creativa de los sentimientos que se permita
experimentar escuchando el paso de sus emociones.
· Respeto
por sí mismo a través de la escucha a su cuerpo: Sus Canales del Poder -34/57-
y del Ritmo -5/15- en sincronía con las activaciones del bazo y el monopolo
magnético, definen su área instintiva. Es la parte de su ser que lo conecta con
el instante vivencial, gracias a la que se siente seguro en su espontaneidad.
Esta zona ocupa la parte
izquierda del gráfico con el bazo; y los centros sacral y monopolo magnético coloreados
en rojo y amarillo en zona central. Descubrimos que es de enorme importancia
para él estar conectado con su flujo a través de su respuesta interna. Sólo de
esta manera todo lo que haga le va a resultar natural y sin esfuerzo, y así va
a beneficiar sutilmente a quienes le rodean, conduciéndoles a su propio ritmo y
sentido del tiempo.
· Dilema
interno primordial: Dada su naturaleza, que se muestra en estas dos definiciones
separadas, nos damos cuenta del reto que supone para Roberto afirmarse en su
esencia. Con la mente, el corazón y los centros de presión sin definir, el
enorme potencial de sabiduría que deja abierto su diseño puede haberse transformado
en una férrea fijación mental, al haber experimentado su indefinición desde la
carencia y no cómo una gran apertura a la diversidad y el enorme potencial de
enriquecimiento que esta configuración supone. La buena noticia es que sólo
necesita integrar dos claves para comenzar a experimentar su diferenciación; el
camino hacia su autenticidad. En su nueva casa, cimentada sobre estas premisas,
se sentirá por fin en un entorno que lo comprende y lo protege, donde el
despliegue de su potencialidad no va a encontrar resistencias para que sus
fuerzas vitales le permitan habitar el mundo plenamente.
De la
energía a la materia
Esta información es
contrastada e integrada por Roberto. El es el protagonista desde el mismo
momento en que comenzó a soñar su casa y eligió este emplazamiento en Cuarte de
Huerva, al sur de Zaragoza, para construirla.
A través del proyecto, los
mapas de lo invisible se van transmutando en una realidad más densa; las dinámicas
internas del habitante son confrontadas con el suelo, los materiales y los
climas (5). Se nos revelan confluencias; la forma emerge de esta simbiosis sin
apenas resistencias.
Figura 3. Gestación de la
planta del edificio utilizando las herramientas de autoconocimiento.
De esta manera, las
fuerzas del habitante que dinamizan este sueño generan las pautas sobre las que
se constituye el esqueleto material de la su vivienda.
Figura 4. Planta
definitiva de la vivienda.
Señalamos los aspectos más
destacados que, desde el diseño, acompañan la naturaleza esencial de Roberto:
· Ambivalencia:
habitante ermitaño o enormemente social, dependiendo de sus estados de ánimo.
Protección de la vivienda de un entorno sin aparente urbanidad. Se origina una
vivienda que emerge desde su condición maciza frente las orientaciones norte y
oeste con muros ciegos de gran espesor para combatir la contaminación acústica,
proteger del fuerte viento dominante “el cierzo” y preservar la privacidad.
Figura 5. Vista aérea. Los
muros macizos a Norte y Oeste aportan protección climática, acústica y visual.
Una vez se cruza el patio
interior de acceso, entramos al espacio de mayor amplitud de la vivienda. Un espacio
idóneo para socializar a través del que los espacios exteriores a ambos lados
pueden conectarse generando una expansión mayor. La condición de intimidad se
va acentuando gradualmente a medida que nos acercamos hacia la zona de
descanso, pudiendo establecer barreras temporales mediante grandes puertas
correderas que desaparecen entre las particiones.
Figura 6. Vista desde el
acceso. La vivienda se muestra, se hace porosa. Los espacios se
interrelacionan.
· Conexión
con el flujo natural de la vida: creación de pautas espaciales, de atmósferas
que favorezcan la sincronización de sus propios ritmos con los ciclos de la
naturaleza. Conseguimos que todas las estancias queden orientadas hacia el sur
mediante una disposición radial que al mismo tiempo permite una secuencia espacial
de espacios intermedios o umbrales. De esta manera se intensifica la relación
directa con el paisaje natural, con las estaciones y los ciclos solares; con la
vida: la luz, la tierra, el aire, el agua y la sombra matizada por los árboles
que constituyen una segunda protección. Esta atmósfera que desdibuja los
límites interior –
exterior, facilita la conexión del habitante con los estratos más profundos,
más íntimos y casi abandonados de su naturaleza. Las aperturas hacia el sur,
nos permiten aprovechar la energía pasiva del sol: en verano, las hojas de
parra protegen el vidrio de la radiación solar directa, y al desprenderse llegado
el invierno, permiten el paso de los rayos solares hasta el interior de la
vivienda. La pequeña inclinación de la parcela favorece las vistas a las
colinas cercanas.
Figura 7. Fachada sur con
las pérgolas para el crecimiento de la vegetación caducifolia.
· Se
encuentra en la segunda fase de su vida, a la que ingresó entre los 29 y 30
años. Se siente cómodo en la retirada, donde poder descubrir lo que es fiable y
funciona en el mundo. Empieza a ser considerado por su sabiduría. Roberto es un
gran lector, que necesita ver los libros para sentirse atraído por ellos. La
zona más próxima a los dormitorios, vinculada al patio del almendro autóctono,
toma su luz del norte, evitando reflejos o sombras. Es la mejor zona donde
ubicar su rincón de lectura.
Al ser el espacio que
comunica las estancias más íntimas de la casa con la parte más abierta y
luminosa, será recorrido con frecuencia a lo largo del día. La presencia de los
libros, va a ser una constate que envuelva al habitante en una atmósfera
propicia para que se sienta seducido e invitado a saborear el placer de la
lectura de manera espontanea. Sus hijos crecerán en un paisaje que los
acompañará a integrar el hábito de la lectura de manera casi natural desde sus
primeros pasos. Parece fácil imaginar momentos mágicos compartidos en familia
propiciados por la cercanía de los libros.
Figura 8. Vista interior.
Desde el patio de acceso un almendro autóctono recuerda el paso de las
estaciones.
· En esta fase, se encuentra en el momento de crear familia, de expandirse. Las estancias
han sido dimensionadas para que puedan ser dobles o individuales, por lo que
posibilitan distintas opciones de ocupación que puedan adaptarse a la futura
familia. Mientras llegan los niños quedarán disponibles para amigos o
invitados.
· Su
proceso de maduración natural, pausado, en tres fases, entra en sintonía y
sincronía con la elección de materiales nobles, que envejecen bien con el paso
del tiempo. La vivienda se ha pensado utilizando una paleta reducida de
materiales naturales como la madera natural y la piedra que acentúan y
orquestan el acompañamiento de los ciclos naturales con ciclo global de
duración de su propia vida.
(1) Un buen día dejé de trabajar y
procuré pensar libremente en lo que hacía y se hacía. Ese mismo día empezaron a
desprenderse tantos añadidos que a cualquier pensamiento serio sobre
arquitectura se abrazaban, se pegaban como auténticas lapas, crustáceos. El
resultado limpio era atractivo y pensé que también podía llamarse Arquitectura,
tal vez arquitectura, y disfruté con esa a minúscula, ya que me bastaba para
resolver los problemas que siempre la arquitectura tuvo que resolver:
ordenación del mundo en donde desarrollamos nuestra vida.
Alejandro
de la Sota
(2) …se produce un estado más feliz si
nos entregamos a lo que a veces se llama autorregulación organísmica, que es
más o menos lo que los chinos llamaban el Tao: la Ley de la Naturaleza.
Claudio
Naranjo
(3) La arquitectura no debe hacer más,
ni en ningún caso menos, que ayudar al hombre a regresar a casa.
Aldo Van
Eyck
(4) Todo ser humano tiene en su
interior, en su alma, un sonido bajito, su nota, que es la singularidad de su
ser, su esencia. Si el sonido de sus actos no coincide con esa nota, esa
persona no puede ser feliz.
Sofía
Prokoffieva
(5) … si la arquitectura es clima,
también es verdad que son muchos los climas que en ella intervienen: climas de
invierno y de verano, climas de luz y de calor, climas de transición entre
interior y exterior, climas en la arquitectura popular o en la arquitectura
representativa, climas naturales o climas artificiales y, por último, incluso,
están los climas que no son climas, climas sonoros, psicológicos, mágicos, con
los que se genera la infinita variedad de los espacios arquitectónicos.
Rafael Serra